miércoles, 29 de abril de 2020

Capítulo Cuatrocientos dos

3 DESEOS

El primero es escuchar de nuevo sus palabras favoritas, sus ideas que nunca pude entender y la incomodidad que sentía al entablar una conversación con él, simplemente fuimos y somos muy distintos. Nunca comprendí tu mundo y pese al daño que recibimos mutuamente el cariño mutuo continuó hace poco menos de un año. Me alegra mucho la estabilidad que tienes hoy, y siempre serás el dueño del 80% de mis canciones, sería extraño escribirte ahora pese a que siempre lo hago en fechas especiales, esta vez lo hice pero me sorprendió saber que ya no tienes el mismo número, quizá fue una señal del destino para poner fin a mi deseo lejano contigo.

El segundo eres tú, el más noble y amable de mi vida. Te quiero tanto que ningún capítulo ni canción ha sido suficiente para destacar tu belleza. Amo tu forma de ser y serías perfecto si tan solo yo fuera perfectamente imperfecta para ti. Pero soy yo y conoces mis ideas, aceptas todo de mi y por eso me duele tenerte en esa posición, deseo fervientemente no hacernos daño y felicidad para ti en todo sentido y todo momento.

El tercero y el menos importante, es aquel que no merece nada aquí pero que nunca creí llegaría a marcar mis decisiones y mis errores de esta manera tan absurda. No me creía capaz de sentir tal atracción ante alguien y mucho menos que podía ser reforzada con su desdén. Deseo que encuentres lo que buscas y no caigas en el camino absurdo de tu pasado.

-Amaranth


lunes, 20 de abril de 2020

Capitulo Cuatrocientos uno

INVIERNO

Tomar decisiones para precautelar mi integridad no es lo mío. Puedo decir solemnemente que esta vez  llegó todo a su fin, cada uno tomará su camino, todos y cada uno de nosotros olvidaremos ciertos momentos y promesas. Te voy a extrañar pero espero volver a verte cuando el invierno termine, no creí que ponerle un punto final a esta historia sería así de doloroso, el ya no verte, el no sentirte, no reír contigo será algo nuevo a lo que nos tendremos que acostumbrar (o quizá solo yo).

Sabíamos que este momento llegaría, que iba a extrañar las inundaciones, los reproches, las desdichas, los malos momentos que se solucionaban con un poco de tu felicidad. No se cuando podré volverte a ver, cuando podré volver a reír contigo, o cuando podré volver a ver como te ríes de nuestras idioteces en conjunto. Cuídate mucho, porque si te llega a pasar algo antes de que nuestro encuentro se de no será fácil controlar mis emociones.

Concuerdo con esa idea de que debí haber disfrutado tu presencia un poco más, toda la felicidad que teníamos debí guardarla más en mi memoria para cuando me haga falta. Me agradaría que estuvieras ahí cuando necesite tu concejo y tu reproche, tus risas y tus abrazos lejanos faltos de cariño pero de mucha emoción.

Ha sido un placer tenerte conmigo por 5,4,3,2,1 años todo ese tiempo que pasaste junto a mi, al inicio como un arrogante desconocido lleno de codicia y sin ganas de conocerme pero después como ese ser inseparable que siempre estuvo para mis momentos de montaña rusa.

Pensándolo por el lado amable, conoceré a nuevos oidores y nuevas personas de las cuales será difícil separarse y el circulo se repetirá.

Gracias por tu tiempo. Esto quedó muy cursi...

-Amaranth