Perder
Él dice que la tormenta no va a durar por siempre, pero tampoco puede predecir cuanto lo hará...
Romper y quebrantar paradigmas, darse cuenta de la propia humanidad, saberse débil, triste, vulnerable. Saberse humana y enfrentar al mundo con esa humanidad.
Pienso en cual habrá sido el deseo que pedí en mi último cumpleaños, llamo a las señales que siempre me han funcionado, sin embargo, todo parece producto de algún espejismo. Pienso en silencio e intento descifrar los porqués y como siempre no tengo respuesta alguna.
Han sido meses de espejismos de encontrarme con murmullos externos; que opinan, aconsejan y juzgan. En este tiempo mi temor de perder se ha hecho realidad. No sé si he perdido más de lo que he ganado pero de alguna forma, he perdido. Y frente a la perdida, no he podido -ni si quiera- llorar a viva voz o a la luz del día. Lo poco que he logrado son sollozos en las madrugadas, cuando soy presa de la obscuridad, de mis pensamientos, de la ansiedad, cuando soy la única que puede escuchar.
Estos días me debato entre seguir o frenar, he descubierto verdades que percibía pero que mi corazón se empeñaba en ocultar. Y frente a lo descubierto, solo he guardado silencio pues creo que ya hay demasiado ruido. No obstante, internamente me pregunto si podré continuar resistiendo, ¿podré vivir esperando el futuro?, ¿ese futuro llegará algún día?. Espero en silencio, con respuestas producto del miedo, del enojo, de la decepción, del falso optimismo, en fin, de la tristeza.
En este tiempo, perder me ha regalado ausencias que me han lastimado de muchas formas, algunas perceptibles y otras que he guardado en silencio, intentando mantener la calma ya que es lo único que mi razón me permite.Sin embargo, en estos días mi encaprichado corazón lucha por hacerlo evidente por mostrar que día a día se cansa y cada vez parece más difícil controlarlo...
-Einor